Caravaca Año Santo 2010-CV Puerto Real
El Puerto Real se lleva el choque en el tie-break
En el choque estelar de la decimoctava jornada
de la Superliga-2 masculina de voleibol, el CV Puerto Real ganó en Caravaca por 2-3, en un partido lleno de emoción, muy intenso y con un desempate que a punto estuvo de provocar algún paro cardiaco en el abarrotado Pabellón Juan A. Corbalán de Caravaca de la Cruz.El primer set comenzó con mucha igualdad en la cancha, con ventajas cortas y mínima diferencia a favor de los gaditanos (15-16). El saque de Puerto Real incomodaba mucho a los de Chema Nicolás, que no construían el juego con facilidad. Sin embargo, una buena racha de saques de los locales consiguó desnivelar la balanza para dar el primer set al CV Caravaca Año Santo 2010 (25-21).
El segundo juego comienza con polémica, ya que la amonestación con tarjeta amarilla
al capitán caravaqueño Marín descentra a los jugadores blanquirojos, que no pueden enjugar la diferencia que había acumulado Puerto Real y que supo administrar con muy buen hacer el cuadro gaditano (20-25).El tercer set vuelve a iniciarse con igualdad, si bien el CV Caravaca aprovecha mejor sus opciones y llega con ventaja clara a los tiempos técnicos (8-6 y 16-12), jugando mejor que su oponente y venciendo con claridad por 25-17. El cuarto juego muestra al equipo de Miguel Ángel Serrano dispuesto a ponerle las cosas más difíciles a los locales, que no consiguen entrar en el partido y sufren demasiados altibajos como para igualar el marcador, llegándose al final del set con clara ventaja andaluza (18-25).
Y en el desempate, comezaron muy mal las cosas para el CV Caravaca, que con una floja recepción
permitió a su rival jugar cómodamente y adquirir ventaja que parecía definitiva ( 2-5 y 5-8). Ahí surgió entonces el corazón de los locales, que animados por más de 300 espectadores pudieron igualar el marcador (10-10) y a partir de ahí, intercambios de saque y puntos de partido tanto para uno como para otro equipo. Y en un final no apto para enfermos de corazón, los gaditanos estuvieron sólo un poco más acertados y pudieron convertir uno de sus puntos de partido, ganando 23-25 y desatando una inmensa alegría en toda la expedición puertorealense. El público despidió con una ovación tanto a los locales como a los visitantes, que demostraron ser un firme candidato al ascenso de categoría.
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